Nuestro trabajo por la paz debe comenzar dentro del mundo privado de cada uno de nosotros.
Para construir para el hombre un mundo sin miedo, tenemos que vivir sin miedo. Para construir un mundo de justicia, debemos ser justos.
¿Y cómo podemos luchar por la libertad, si no somos libres en nuestras mentes? ¿Cómo podemos pedir a los demás que se sacrifiquen si no estamos dispuestos a hacerlo?…
Sólo con una verdadera entrega a los intereses de todos podemos alcanzar esa fuerza y esa independencia, esa unidad de propósito, esa equidad de juicio que son necesarios si estamos a la altura de nuestro deber para con el futuro, como hombres de una generación que tuvo la oportunidad de construir en nuestro tiempo un mundo de paz
Dag Hammarskjöld